En el mundo de la seguridad contra incendios, pocas herramientas han sido tan ampliamente utilizadas, o tan debatidas en los últimos años, como la espuma de extinción de incendios.
La espuma de extinción de incendios ha sido durante mucho tiempo una defensa de primera línea para controlar incendios peligrosos, especialmente aquellos que involucran líquidos inflamables como combustible, aceite y productos químicos.